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En cuanto al IAE (Impuesto sobre Actividades Económicas), la normativa permite establecer diferentes categorías para las vías públicas, dándoles diferente valor según la zona en la que se encuentren. En nuestro caso, la categoría más cara también se encuentra en el coeficiente máximo legal permitido, mientras que las otras 4 categorías establecidas están en valores muy cercanos al máximo permitido.
Por lo que respecta al IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles), Sant Cugat es el municipio de más de 50.000 habitantes de la provincia de Barcelona donde más se recauda por habitante y en comparación con el resto de municipios de España de tamaño similar también se encuentra en cabeza. Cierto es que el tipo de gravamen del IBI (0,528%) no es de los más altos y está lejos del máximo legal permitido (1,1%) pero los valores catastrales hacen que el importe a pagar sea muy elevado, con lo que la presión fiscal para los vecinos en este impuesto también es muy alta.
A estos impuestos hay que añadir dos más, el Tributo Metropolitano, un impuesto que estamos pagando desde octubre de 2019, y que no deja de ser un nuevo recargo sobre el IBI para nuestros vecinos y que iba a suponer una mejora en el transporta público urbano e interurbano, y que en ningún caso ha supuesto una mejora del mismo, y el nuevo impuesto sobre la recogida de basuras que se empezará a cobrar en 2025 y del que desde el gobierno de la ciudad ya se ha anunciado que la cantidad a pagar por cada contribuyente será muy importante.
Ante esta situación, creemos preciso recordar que en noviembre de 2023 el grupo municipal de Junts presentó una moción, con enmiendas de ERC, donde se planteaba una apuesta por la contención fiscal y la buena gestión que asegurara unos servicios públicos eficientes y de calidad, vanagloriándose de no subir impuestos pese al enorme agujero en las cuentas municipales de más de 22 millones de euros que el gobierno municipal anterior formado por ERC, PSC y la CUP habían dejado como herencia en el último ejercicio. Concretamente, y en palabras textuales del teniente de alcalde, Sr. Brugarolas, la moción buscaba "no repercutir en la ciudadanía las consecuencias de la mala gestión pública y para la búsqueda continua de la eficiencia de poder aportar cada vez más con menos".
Y con este escenario nosotros nos preguntamos: ¿Se atreverá Junts a engañar a sus propios votantes incumpliendo su programa electoral en un tema tan serio y sensible? Dicho programa electoral en el capítulo dedicado a Economía y Hacienda decía textualmente: "Reduciremos la presión fiscal" o "Haremos de Sant Cugat la ciudad con más y mejor prestación de servicios en menor coste fiscal. Sabemos cómo hacerlo, tenemos ideas claras, haremos mucho más con mucho menos. Sant Cugat debe valorizar su potencial, sus importantes intangibles para fortalecerse patrimonialmente, generar nuevos ingresos de gran envergadura y reducir la dependencia de la fiscalidad por financiar los servicios públicos de primera que la ciudad merece". (Fuente: Programa de Gobierno de la candidatura de Josep Maria Vallès (Junts per Sant Cugat), páginas 120 y 121, propuestas 715 y 716).
En consecuencia, desde el Partido Popular decimos ROTUNDAMENTE NO A LA SUBIDA DE LOS IMPUESTOS EN SANT CUGAT y por ello, nos comprometemos a seguir trabajando para evitar que ésta se produzca, exigiendo al Gobierno Municipal y especialmente a JUNTS PER SANT CUGAT, que cumpla su programa electoral, y no repercuta las malas políticas económicas del pasado reciente, de entre otros, sus propios socios de Gobierno (ERC) en los ciudadanos y familias de Sant Cugat.
ÁLVARO BENEJAM és regidor, portaveu i president del PP Sant Cugat
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